La alcaldesa de València, María José Catalá, ha anunciado que el Ayuntamiento comenzará a sancionar los pisos turísticos ilegales y ordenará el corte de luz y agua a aquellos que operen sin licencia antes de que termine el año.
Según Catalá, tras analizar la viabilidad jurídica de esta medida, el Ayuntamiento está preparado para actuar con el respaldo legal necesario.
La inspección municipal determinará si una vivienda está operando de manera irregular. En caso afirmativo, el Ayuntamiento contactará con las empresas suministradoras para cortar el suministro de servicios básicos, lo que permitirá frenar la actividad ilegal de forma efectiva.
Además, Catalá ha destacado la importancia de esta medida ya que, aunque algunos propietarios pagan las multas, continúan operando. Para evitar que esto suceda, se ha decidido recurrir al corte de luz y agua. Las sanciones económicas podrían llegar hasta los 600.000 euros, pero el cese de servicios básicos es lo que realmente permitirá acabar con las actividades irregulares.
El Ayuntamiento también solicitará a la Generalitat la potestad sancionadora para reforzar su capacidad de actuación en la lucha contra los apartamentos turísticos ilegales. Catalá confía en que estas medidas comenzarán a aplicarse antes de finalizar 2024, respondiendo así a las demandas de los vecinos para frenar el crecimiento descontrolado de estos pisos.
